En más de una de nuestras asignaturas nos corresponde hablar de la
socialización y de su importancia para construir la condición
humana tal como la entendemos. Para ponerlo de manifiesto, siempre
hacemos alusión al fenómeno de los llamados “niños salvajes”, crecidos sin casi o ningún contacto humano y en los que,
en consecuencia, podemos apreciar cuál es el resultado de esa
carencia.
En 1970, FrançoisTruffaut dirige la película El pequeño salvaje (L'enfant sauvage),
basada en la historia real de Víctor de Aveyron, niño que a finales
del siglo XVIII es hallado en un bosque de Francia con signos de
haber crecido aislado de la civilización. De estudiar su condición
e intentar educarle para lograr su integración en la sociedad (cosa
que nunca se consiguió, por cierto) se ocupa el médico Jean Itard,
en cuyos diarios se basa la película. Se trata, así, de uno de los
casos de niño salvaje mejor documentados, y de una de las
películas (podemos encontrar otras, tanto de ficción como
documentales) que mejor retratan este fenómeno.
Siempre convencidos
de la utilidad del audiovisual como recurso didáctico, solemos
utilizar el clásico de Truffaut para ilustrar la temática a la que
nos estamos refiriendo. Para ello, en su momento seleccionamos y
editamos algunos fragmentos de está película que nos permiten
cumplir con ese objetivo en poco más de cinco minutos. Específicamente,
relatan el encuentro de Itard con Víctor y sus primeros exámenes
del niño. Por ello, estas imágenes nos sirven para apreciar el
estado y características de un individuo así. El resto de la
película se centrará en su proceso educativo, pero esta ya es otra
cuestión que, si bien tan interesante como la anterior, no nos
corresponde tratar en ese momento de nuestras clases.
Por tanto, ya que dedicamos tiempo y esfuerzo a realizar esta labor, queremos compartir aquí su resultado, por si a alguien más le pudiera resultar útil.
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