Comparto aquí una de las mejores tiras filosóficas que he visto nunca. La fotocopié de un periódico hace ya más años de lo que quiero recordar e inmediatamente la enmarqué para colgarla en mi estudio. Después permaneció durante varias mudanzas encerrada en una caja hasta que recientemente la he reencontrado y vuelve a ocupar un lugar de honor en la pared frente a mi mesa de trabajo. Es del entrañable Olafo, que por si alguien no lo conoce ya he puesto el enlace correspondiente a esa salvadora Wikipedia que siempre nos permite ahorrarnos explicaciones.
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